Cuando el terror se impone a la cultura social

Así lo manifestó el primer ministro David Cameron que abrió la puerta a limitar el uso de aplicaciones de mensajería instantánea.

En Inglaterra, y en todo el Reino Unido, levantaron polémica las declaraciones de Cameron al admitir que están analizando la prohibición de los servicios de mensajería instantánea encriptada, como WhatsApp, iMessage o Snapchat, después de los atentados terroristas ocurridos en París.

El mismo Cameron se preguntó si Reino Unido quiere permitir un medio de comunicación entre personas, que «incluso en caso de urgencia», con una orden firmada personalmente por el ministerio del Interior, «no se puede leer».

«No podemos permitirlo», dijo -firme- con respecto a esto.

De esta forma, el primer ministro destacó las diferencias entre la mensajería instantánea a través de protocolos de Internet con las llamadas de teléfono, con lo que si las aplicaciones cuentan con sistemas de cifrado, los Gobiernos no tienen capacidad para intercerptar el contenido de los mensajes de los usuarios.

Por esto mismo y, ante la imposibilidad de acceder a las comunicaciones, Cameron abrió la puerta a la prohibición de los servicios de mensajería con los chats encriptados como son WhatsApp, iMessage o Snapchat.

Al cerrar, el primer ministro prometió que si el partido Conservador gana las próximas elecciones se encargará de hacer «una normativa exhaustiva que garantice un lugar seguro dónde comunicarse», según refleja el diario español ABC.