«El Papa no mira televisión así que no va a ver el partido de San Lorenzo», explicó Guillermo Karcher, encargado de ceremonial en diálogo con Radio América.
De esta forma, el Ciclón no tendrá el seguimiento de Francisco en Marruecos, que justo en esta fecha cumple 78 años. Al respecto, Karcher dijo que «no quiere regalos, pidió que los regales se los den a los pobres».
Desde las 16.30, el equipo de Edgardo Bauza se mide frente a los oceánicos en las semifinales del certamen que cierra el año, buscando el pasaje a una final en la que podría medirse nada que menos que ante el Real Madrid.
Desayuno con cuatro «sin techo»
Sencillo, como él. Así es el festejo de cumpleaños del papa Francisco, hoy, en el Vaticano. Su primera celebración como jefe de la Iglesia católica.
A las 7 de mañana, como todos los días, Jorge Bergoglio ofició una misa matutina en Santa Marta, donde vive, pero esta vez lo hizo junto al cardenal Angelo Sodano, decano del Colegio Cardenalicio. El papa quiso que, al ser su cumpleaños, estuviera presente el personal que trabaja en esa casona, apuntó la oficina de prensa vaticana en un comunicado con un agregado especial: «Información sobre la misa matinal del papa Francisco, hoy 17 de diciembre, día de su cumpleaños».
El espíritu festivo estuvo presente a lo largo de toda la misa y, de hecho, concluyó con el clásico «Tanti Auguri (Feliz cumpleaños)», a pedido del director de la Casa de Santa Marta, Battista Rica, , que también es el prelado del Instituto para las Obras de la Religión (IOR).
Entre quienes se acercaron para transmitirle los mejores deseos para este día estuvieron el secretario de Estado, o «número dos» del Vaticano, Pietro Parolin, y colaboradores de esa Secretaría. Además, su amigo y «limosnero» de la Santa Sede, el polaco Konrad Krajewski, quien saludó al papa argentino junto a cuatro personas sin techo que querían ser parte del festejo del pontífice que busca «una Iglesia pobre para los pobres». Fiel a su estilo, Bergoglio los invitó a desayunar en el refectorio de la Domus.
Las cuatro personas fueron elegidas por Krajewski entre aquellas sin hogar que viven a la intemperie en el barrio aledaño al Vaticano.