El kirchnerismo ya humilla a Scioli como parte de una estrategia

(Redacción) – Cristina quiere sacarlo de carrera y el maltrato público es el camino elegido. Ahora le bajaron su lista en Capital, sin avisarle. ¿Seguirá arrodillándose?.

El cierre de listas en la Capital no sólo deparó la «sorpresa» de la interna en el Pro sino que trajo otras cuestiones de fuerte lectura que van marcando el camino hacia octubre.

La sensación de que Massa no tenía candidato para colocar y tuvo que hacer una jugada de último momento que le asegura muy pocas chances de hacer un buen papel en el primer gran test del año electoral es inevitable.

El cimbronazo más fuerte se dio en el kirchnerismo. Cristina Kirchner ordenó castigar a Daniel Scioli y despojó al gobernador de su delfín en la Ciudad –Gustavo Marangoni, el presidente del Banco Provincia– y ni siquiera le cedió buenos lugares en la nómina de legisladores, pese a ser el candidato presidencial del Frente para la Victoria que mejor mide.

Ayer, horas después del desplazamiento de la Casa Rosada del histórico operador del PJ, Juan Carlos Mazzón, La Cámpora, con el guiño de la Presidenta y los insistentes llamados de Carlos Zannini, manejó los hilos de las listas y colocó a Mariano Recalde como aspirante a jefe de Gobierno.

Sin embargo, la presión de Aníbal Ibarra y Carlos Heller fue fuerte y se anotaron con su propia lista de legisladores para disputarle las PASO al titular de Aerolíneas Argentinas. También se inscribieron Gustavo López y Gabriela Cerruti, aunque irán pegados a la boleta de legisladores que confeccionó La Cámpora.

Scioli ha quedado reducido a un dirigente humillado y destratado en su propio partido. pero pareciera que sigue dispuesto a toda claudicación moral con tal de lograr su objetivo de ser el candidato.

Porque, él mismo lo dice, sólo quiere ser Presidente. No sabe para qué, no le importa si sólo es el mascarón de proa de un kirchnerismo residual, no el interesa sentarse en la Rosada par firmar lo que le pongan adelante y ni siquiera lo ruboriza esa imágen servil que está dejando en la gente.

Scioli quiere ser Presidente…y lo demás no importa.