ESCENARIOS

Ganó la grieta. Al menos eso es lo que parece indicar el resultado parcial de las PASO. Por clima y por números el empate en Buenos Aires deja en evidencia que el 70% de la gente cayó en la opción.

Es tan honda la grieta que hoy divide a los argentinos que Buenos Aires logró esconder entre los pliegues de su protagonismo algunos datos que en cualquier otro momento serían titulares en todos los medios: cayeron los Rodriguez Saá, dueños de San Luis desde que su tatarabuelo supo fundarla; perdieron por paliza los Kirchner en su invicto feudo de Santa Cruz; Schiaretti fue vapuleado en Córdoba, pero no por un radical -histórica fuerza que se dividía La Docta con el peronismo- sino por una lista pintada totalmente de amarillo. Y Lilita, la excéntrica e inmortal montaña rusa de la política nacional, logró que la mitad del electorado porteño se encolumnara tras su candidatura; algo que no pasó ni en los míticos años en los que la capital argentina se unía, como una Fuenteovejuna vernácula, para enfrentar al mismo Juan Domingo Perón.

Así lo ocurrido en la provincia de Buenos Aires representa claramente el presente emocional de los argentinos. Y seguramente esa emocionalidad es mmás fuerte que la racionalidad político. No se entiende sino que nadie haya preguntado al gobierno como sigue esta historia del ajuste interminable, ni a la oposición encarnada en Cristina que era lo que estaba dispuesta a hacer para evitar las distorsiones, el deterioro y la corrupción inmanente a su tiempo en el poder.

Todo indica que la grieta será aún más honda en octubre. Si primase la lógica de un empate que será inmodificable cualquiera de las dos fuerzas se quede con «el triunfo», arrastrará al 30 % restante y al 10% de los que habitualmente no votan en las primarias pero si lo hacen en las generales a querer convertirse en referee  de este Boca-River que nos tiene detenidos en un tiempo que debería ser utilizado para otro tipo de debate.

No es bueno el escenario que viene. Se parece demasiado al de la Argentina partida en dos que supo perder todas las oportunidades que el mundo le dio.

No aprendemos más….