Guadalupe Mata: una artista que hoy cosecha su siembra de vocación

Guadalupe Mata, una artista marplatense de 21 años, atraviesa un presente de éxitos  pero para ello, ha tenido que sembrar en el pasado en medio de fuertes cambios personales y familiares.

Nacida en Mar del Plata en julio de 1996, a los seis años ya mostraba por dónde irían sus pasiones al realizar dibujos y copiar caricaturas de sus personajes favoritos de la televisión. Su mamá Vilma la incentivó ya que hacía artesanías de todo tipo, y su papá Gustavo la influenció siendo creativo en la casa para arreglar, con pocos recursos, todo aquello que no funcionaba. Además, de sus padres heredó el interés por la investigación y por saber más de la historia y la cultura en general.

«A los ocho años, por cuestiones económicas tuve que marchar junto con mis papás a España dejando atrás a mi querida familia. Íbamos en búsqueda de un mejor futuro. Fue un gran cambio porque pasamos de una gran ciudad a un pequeño pueblo en Almería en la comunidad de Andalucía, así que nos tuvimos que adaptar», contó la marplatense.

Lejos de estancarse, Guadalupe destacó que a sus trece años tuvo seguir sus estudios en otro pueblo. Y en el IES Martín García Ramos conoció a un profesor de literatura que le cambió la vida: José Escánez Carrillo. «Él creyó en mí. Con ese bello encuentro inicié mi camino en el arte escribiendo poesía. En 2011 gané mi primer premio de poesía en el XI Certamen de Cuento y Poesía con el poema “Gritos Sordos”. Esto sería solo el comienzo de una gran aventura porque al siguiente año, no solo volví a participar en el certamen del instituto y gané el primer premio sino que había descubierto otra parte de mí, mi pasión por la pintura», recordó.

Además, sobre el principio del amor por la pintura, Mata comentó: «Un Día de Reyes, mi mamá me regaló un lienzo dibujado y acrílicos. A partir de ese instante, no paré. En ese entonces, había comenzado a hacer mis primeros cuadros y muchos de ellos, gracias a la invitación del director del instituto, Francisco Torrecillas, los pude mostrar en mi primera exposición llamada “En busca de paisajes” donde el instituto se encargó de financiar la difusión de la muestra y logré vender casi todos».

En plena siembra y pleno crecimiento en España, la familia Mata debió regresar a Argentina. «Al principio fue una gran frustración y dolor debido a que después de tanto esfuerzo que habíamos puesto para comenzar esta nueva vida, no teníamos opción y teníamos que marchar. Ese año fue una locura porque aunque nos teníamos que enfrentar al regreso, también fue cuando más catarsis creativa tuve y así es como gané el segundo premio en el Concurso de Redacción sobre Igualdad de Género, convocado por la Fundación José Tomás y la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía para el alumnado de 4º de ESO de la Comunidad Andaluza», contó Guadalupe.

Durante todo el ciclo lectivo 2012 participó declamando poesía en la obra sobre la Constitución Española encabezada por su profesor. Además fue presentada en Almería y también a diversas personalidades de las instituciones albojenses (Albox). «Hasta el último día fue productivo ya que, antes de irnos, me llamaron por teléfono avisándome que había ganado el primer premio de mi poemario “Como agua entre los dedos” en el XI Certamen Literario Federico García Lorca del IES Santa Engracia Linares. Luego ese poemario fue publicado en el libro de ganadores del concurso y en él explicaba todo el proceso que habíamos tenido que pasar desde la ida a España hasta el hecho mismo de volver a la Argentina con la frente marchita como el viejo tango», explicó Guadalupe sobre el camino de regreso a Mar del Plata.

Al volver, todo había cambiado, ella ya no era la misma y su familia tampoco. «Así que, con mucho tiempo y paciencia tuvimos que amoldarnos y aceptarnos. Este tiempo fue muy fructífero para saber que mi vida era la escritura. Pero no sería hasta mucho tiempo después, cuando descubriría que lo mío era el mundo de las artes plásticas», recordó.

En «La Feliz», todos los colegios estaban a mitad de ciclo, así que nadie la aceptaba como oyente y tampoco como alumna porque la mayoría no tenía vacantes. Hasta que, en 2013 la aceptaron en FASTA. «En aquel tiempo ya había terminado el Taller de Escritura Fernando Pessoa coordinado por la profesora de literatura Evangelina Aguilera y se había publicado mi poema Ambrosio en la Sección de Cultura del Diario La Capital. También al finalizar el taller realizamos la presentación de la plaquette del Taller Literario en el Museo Bruzzone. En ese entonces gané una mención honorífica de categoría A en el XVII Concurso de Poesía Juventud Poeta del Mar 2012 encabezado por la Sociedad de Escritores Marplatenses», relató Guadalupe.

Mostrando una gran predisposición para la acción y facilidad para el surgimiento de ideas, Mata contó: «la escuela FASTA me aportó muchas experiencias ya que conocí a uno de mis mejores amigos, Carlos Fratini, un gran poeta marplatense al que admiro mucho. Con él y otros amigos más creamos la primera Comisión de Arte del colegio. Buscábamos poder desarrollar actividades educativas y artísticas, abogar por la creatividad en la escuela. En ese tiempo, organicé el Encuentro Artístico-Juvenil y Concurso “Hacé la que te pinte”, que consistía en la realización de producción artística que luego sería evaluada por el jurado en el cual yo participé junto al profesor Pablo Malaret y la profesora Liliana Forese».

Además, Mata relató que «también organicé una actividad con los alumnos de primer año de primaria para unificar la literatura, música y dibujo. Realizamos ciclos de lectura por la mañana, ciclos de cine, buscamos donaciones de cuadros para exponer en las paredes del colegio que actualmente se encuentran allí, entre otras muchas cosas. Y fui invitada a exponer junto a grandes artistas de Mar del Plata como Miguel Canatakis y Daniel Baino al “Encuentro Artístico y Cultural” en colaboración con el Hogar de María y encabezado por la entidad Abogar en la Plaza del Agua».

Su formación continuó, ya que dejó de pintar de manera autodidacta y empezó a estudiar diferentes técnicas, materiales, a formarme en el Atelier de Marte coordinado por Vanesa Levitzky durante dos años. «Pero a la vez que me acercaba a la pintura me alejaba de la escritura. Entonces en 2012 participé de la Primera Muestra Anual del Atelier de Marte en el Espacio Clarín. Al siguiente año en el Centro Cultural Padre Múgica participé en la Segunda Muestra Anual del Atelier de Marte, en un Encuentro Artístico Ecológico y en una exposición de una serie de obras de mi autoría. Fue un lugar muy grato para mí donde conocí a gente que intentaba preservar toda la cultura marplatense dándonos el espacio a todos las artistas de la ciudad sin tener prejuicios de nada ni de nadie».

En el 2014 realizó su primera muestra independiente titulada “Discromforme, mezcla de color y forma” en  La Papallona. «Fue una de mis mejores experiencias como artista. Posteriormente, dejé el Atelier de Marte pero mi ansias por seguir aprendiendo no se frenaron ya que en julio del  2014 tuve una propuesta que me motivó mucho ya que se presentaba como un desafío y  este era el de ilustrarla portada del poemario “Los elementos del decir” del poeta marplatense Yonatan Daniel Amado Tarantino. Acepté. Desde ese entonces, no paré de ampliar mis capacidades hacia otras áreas del arte. El libro ha sido expuesto en la Feria del Libro de Mar del Plata», destacó Mata.

En enero de este mismo año se le presentó la oportunidad de poder ilustrar el libro infantil “Micas e a Infinita Estrada Azul” realizado por la autora brasilera Emes de Fátima. «Tuve el placer de conocerla personalmente ya que mi hermana al vivir en Río de Janeiro y saber que a las dos nos apasionaba la escritura hizo que nos pusiéramos en contacto para intercambiar escritos. Y en mi primer viaje a Río nos conocimos», comentó. Además, Mata se encuentra trabajando en la ilustración de un libro de cuentos infantiles de la brasileña Mariela Castellote.

Su formación continuó en la Escuela de Artes Visuales Martin Malharro y fue seleccionada para exponer en la Usina del Arte de la Escuela llamada “Sinérgica” en el Auditorium. «En mi primer año descubrí que me gustaba enseñar y comencé a dar clases particulares de pintura y dibujo a jóvenes. A través de la experimentación y la búsqueda de la expresión intenté desarrollar el análisis crítico de las creaciones artísticas de mis alumnos», agregó Mata. «Hoy en día, ya terminé mi primer año de la carrera de Profesorado en Artes Visuales. Al finalizar el ciclo lectivo fui invitada para exponer en La Muestra de Arte del Centro Castilla y León coordinado por mi amigo de carrera e ilustrador y artista plástico Willy Pinuer. También expuse obras en el mes de diciembre y enero», redondeó.

Actualmente, la marplatense sigue proyectando y «buscando ampliar las posibilidades que el arte me puede dar». Junto con Willy Pinuer y María Laura Vásquez están coordinando una muestra artística colectiva llamada “Lazos” que consiste en la unión sus diversos estilos a partir de la textura, desde todos los aspectos. «Estamos buscando lugares que nos den la oportunidad de exponer», contó.

Sus ganas, sus ideas y sus proyectos no paran. «También estoy llevando a cabo un emprendimiento llamado Shaira, consiste en que lo que la gente ya no utiliza porque está viejo o no le gusta lo recicle y me lo traiga. Lo que hago son intervenciones artesanales en los objetos de tela dándole una cara nueva y que se puedan reutilizar», destacó Guadalupe. «Y estoy comenzando un taller de dibujo y pintura particular en mi casa, es un taller que permite la búsqueda de la expresión de cada uno. Y dadas mis experiencias en ámbitos distintos dentro del arte puedo abarcar un amplio abanico como ilustración, pintura, dibujo y escultura», finalizó la artista.