La ciudad en cuarentena: ¿Qué pensamos los marplatenses?

Una amplia y extendida encuesta realizada en la ciudad da cuenta de la mirada que tenemos sobre este tiempo de aislamiento. ¿La conclusión?: la culpa es del otro.

La decisión de retroceder a fase 3 por 10 días registra un alto nivel de acuerdo. 7 de cada 10 marplatenses concuerdan, siendo las mujeres, los mayores de 40 años y quienes se desempeñan en relación de dependencia los que más acuerdan con el retroceso de fase, en tanto los trabajadores independientes se manifiestan con mayor proporción en desacuerdo.

Independientemente de la fuerte validación de la medida, el impacto del cambio de fase se observa tanto en lo emocional como en lo económico. El 46% reconoce que su estado de ánimo ha empeorado ante la noticia del cambio de fase, siendo los más afectados los jóvenes, los trabajadores independientes y aquellos que reconocieron una disminución en sus ingresos. En cambio, entre quienes se desempeñan en relación de dependencia reconocen que el cambio de fase no ha impactado en su ánimo e incluso manifiestan que lo ha mejorado, aunque tal impacto positivo ha sido en menor proporción.

En términos globales un 42% afirma que sus ingresos se mantendrán iguales en tanto un 32% reconoce que disminuirán. La afectación de los ingresos se observa directamente relacionada con la situación ocupacional: en mayor proporción los independientes afirman que verán disminuidos sus ingresos ante el cambio de fase, mientras que quienes están en relación de dependencia reconocen que no sufrirán variación alguna.

Con relación al impacto en el desarrollo de la actividad laboral, un 36% reconoce que continuará desempeñándose de igual manera, un 17% con menos volumen de trabajo por la restricción de circulación y un 12% se verá imposibilitado de trabajar.

Poco más de la mitad considera que las reuniones sociales y otras actividades de esparcimiento son las que mayor impacto han tenido en el brote de casos en Mar del Plata. Si se pone foco en este guarismo puede observarse que refleja, en mayor proporción, la opinión de los mayores de 40 años, mientras que los menores lo atribuyen, en mayor proporción, a las actividades deportivas permitidas y a la reapertura de actividades económicas en segunda medida. Los trabajadores en relación de dependencia coinciden, en mayor proporción, que el impacto superior en el brote proviene de la reapertura de actividades económicas, mientras que más trabajadores independientes manifiestan que ninguna actividad en particular ha tenido impacto.

Hay un alto nivel de acuerdo en que es necesario que el compromiso para combatir la propagación del Coronavirus en la ciudad provenga de todos los actores sociales trabajando juntos. Sin embargo, se registra menor coincidencia en este sentido respecto al relevamiento de mayo: mientras que al inicio de la pandemia 7 de cada 10 marplatenses coincidían en que se requería de un esfuerzo comunitario, hoy alcanza un 49%. En contraste, se duplica el porcentaje de compromiso requerido por parte de los ciudadanos, alcanzando ahora un 40%. En un análisis más profundo, los trabajadores independientes demandan, en mayor proporción, mayor compromiso de los gobernantes, lo mismo ocurre entre aquellos que adjudican mayor peso en el brote a la reapertura de las actividades económicas. Los varones, los mayores de 40 años, quienes trabajan en relación de dependencia y quienes creen que las reuniones sociales han tenido el mayor impacto en el brote asignan la demanda de mayor compromiso a los ciudadanos, mientras que las mujeres, los menores y los inactivos demandan mayor compromiso de todos trabajando en conjunto.

Respecto del compromiso percibido para responder de manera efectiva al brote de Coronavirus sobresalen múltiples emergentes interesantes. En términos generales se percibe un menor nivel de compromiso de todos los actores durante la pandemia respecto de la medición de mayo. Los ciudadanos de Mar del Plata globalmente han sufrido la peor caída en el compromiso percibido, pasando de un diferencial (mayor compromiso – menor compromiso) del 52% al único diferencial negativo de -33%. En otras palabras, se destaca la percepción de poco y nada comprometidos de los ciudadanos marplatenses.

A pesar de la baja performance de compromiso que como comunidad tenemos, nuestro compromiso autopercibido se mantiene elevado, registrando un 85% de diferencial, similar al observado en mayo. Más aún, se destaca que el nivel de compromiso personal es el segundo en ranking, solo superado por el percibido respecto del personal sanitario, el cual asciende al 95% entre muy y bastante comprometido.

Las fuerzas de seguridad y los tres niveles de gobierno han sido los restantes actores con más caída en el diferencial de compromiso percibido. No obstante, cabe resaltar que el gobierno municipal aún ostenta casi un 45% de diferencial positivo, seguido por el gobierno nacional.

Los empresarios en general son los únicos actores que presentan un diferencial superior respecto de mayo, quedando rankeados en la mitad del gráfico de diferenciales. En esta oleada superan, aunque levemente, el diferencial de compromiso percibido respecto del propio empledor.

Para finalizar propusimos la siguiente consigna: sintetizar en sólo una palabra lo que representa para vos la cuarentena hoy.

Con más de 4000 expresiones personales y espontáneas pudimos elaborar una nube de palabras que consolida las sensaciones que nos genera la cuarentena. Hartazgo, incertidumbre y prevención configuran el podio.

-La encuesta en detalle-

Resultados encuesta Fase 3