La Cumbre del Clima busca encaminar los acuerdos de París

La Conferencia del Clima (COP26) se reunirá en Glagow, Escocia, intentará dejar atrás el fracaso de la última cumbre climática mundial y finalmente avanzar más allá del Acuerdo de París.

 

La Conferencia del Clima (COP26) se reunirá en Glagow, Escocia, a partir de este fin de semana para intentar dejar atrás el fracaso de la última cumbre climática mundial y finalmente avanzar más allá del Acuerdo de París, firmado hace ya seis años, y utilizar lo que muchos creen es la última oportunidad para revertir los efectos del cambio climático.

La cita mundial que comienza el próximo domingo llega después de la fallida cumbre de 2019, que iba a realizarse en Chile, pero por el grave estallido social en el país sudamericano se trasladó a Madrid, donde el encuentro fue considerado un fracaso comparable a la cumbre de Copenhague en 2009.

La COP25 se había planteado cinco objetivos principales: lanzar el mercado internacional del carbono, es decir, un mercado de comercio de emisiones que permita a los países intercambiar créditos de carbono; hallar fondos para afrontar los daños provocados por el cambio climático; elaborar una hoja de ruta para que los países desarrollados financien a los países en desarrollo en su conversión hacia energías limpias; presentar las nuevas metas para garantizar el cumplimiento de los compromisos asumidos en París en 2015 e integrar los componentes en materia de género, derechos humanos y derechos de los indígenas.

Sólo uno de esos objetivos se cumplió y a medias, con la aprobación de un plan de acción de género, pero se dejó de lado por falta de acuerdo la cuestión de derechos humanos y derechos de los pueblos indígenas, dos de los grupos que más sufren el impacto climático.

El Acuerdo de París, que entró en vigencia en 2020, es considerado un hito en materia de lucha contra el calentamiento del planeta porque hizo que los 197 países firmantes tengan por primera vez una estrategia común para emprender esfuerzos por combatir el cambio climático y adaptarse a sus efectos, con mayor apoyo para los países en desarrollo.

Su meta es mantener el aumento de la temperatura global promedio por debajo de los 2 °C y perseguir el esfuerzo por mantenerlo a 1,5 °C en relación a los valores preindustriales.

Un objetivo ambicioso pero que no incluyó detalles sobre como alcanzarlos.