Amenazaron con no ir al acto en la Rosada y van a poner toda la carne al asador para lograr revertir una derrota inevitable en el ballotage. Sueldos y manejo de presupuesto los unen.
Los aires de derrota llenaron de nerviosismo las filas del oficialismo. Ya son pocos los que están dispuestos a dejar que Cristina lije las ya de por si escasas posibilidades de triunfo de Daniel Scioli. Y no es porque quieran demasiado al candidato, es que todos y cada uno de los protagonistas de esta historia cobran jugosos salarios del estado y manejan millonarios presupuestos en sus organizaciones.
Enterados del acto en la Casa Rosada y temerosos de que la presidente lo utilizara para sepultar las últimas posibilidades de victoria, amenazaron con no ir y boicotear el final de mandato con protestas y marchas que pusiesen en evidencia los errores y obligaran a Scioli a lo que tanto le reclaman y a lo que no se anima: despegarse de Cristina y tomar independencia en el mensaje.
Un grupo de organizaciones lideradas por el Movimiento Evita exigió certezas sobre el contenido del acto que marcaría el regreso de Cristina Kirchner a la escena pública, luego de la derrota del domingo.
Es que para los jefes de organizaciones sociales el 22 está en juego mucho más que una elección presidencial
“No vamos a ir a un acto a matar al candidato peronista. Que los verdugos sean ellos”, fue el mensaje de “las orgas”. Además del Evita, liderada por Emilio Pérsico, se plegaron a ese contraataque Miles, de Luis D’Elía; el Frente Transversal, de Edgardo Depetri; los Descamisados, el MUP, John William Cooke, Quebracho, Corriente Martín Fierro (Tito Aragón), Octubres, MUP, JP Evita, PSOL, Tupac Amaru, Frente Grande, Seamos Libres, Partido Comunista, Descamisados, CTEP entre otras, que hasta hace un tiempo confluían en Unidos y Organizados.
No sólo amenazaron con no asistir a la Casa Rosada sino que, como desafío, convocaron a un “Cabildo Abierto” este viernes a la tarde en el Congreso para dar señales de un apoyo a Scioli sin importar lo que dijera Cristina.
«Tenemos tres semanas para persuadir a esos siete millones de votantes que no votaron a Scioli para que lo hagan. Como decía Perón conducir es persuadir, y para persuadir hay que saber escuchar críticas, opiniones y hasta quejas, pero también para decir que votar a Scioli es votar por un proyecto de soberanía nacional y de justicia social», dijo Jorge Taiana, miembro del Movimiento Evita.
Luis D’Elía, por su parte, apuntó que «no estamos vencidos, estamos de pie. Debemos tocar todos los timbres para obtener la victoria el 22 de noviembre», mientras Navarro, sostuvo que
«No queremos cambiar para atrás, volver a la desocupación y a la pobreza. Queremos lo que conseguimos en estos años con Néstor y Cristina: un modelo de consumo, de salarios y justicia social. Macri significa el país del ajuste, de la devaluación salvaje, la pobreza. Scioli es el proyecto de la producción, la salud pública, más salario, más consumo, más trabajo» agregó.
