La Argentina descendió tres lugares y se ubica en la posición 169 entre 178 naciones relevadas, según un estudio privado. Alcanzó el nivel más bajo en 20 años.
El país volvió a reprobar un examen global de libertad económica. La Argentina cayó tres lugares y este año quedó en el puesto 169 entre 178 países, según el ranking del think thank conservador Heritage Foundation, al que tuvo acceso Infobae. La libertad económica se deteriora en forma progresiva y el país continúa en franco retroceso desde que se instauró el cepo al dólar.
Con todo, el dato histórico es el más preocupante: el país tiene la libertad económica más baja desde 1995 y ya se ubica entre los últimos 10 lugares del mundo, junto a países como el Congo e Irán. Este instituto ligado al partido Republicano en Estados Unidos define a la Argentina como una «economía reprimida o cerrada» por cuarto año consecutivo. Como había sucedido el año pasado, sólo Venezuela y Cuba se encuentran por debajo del país en la región, dentro de las 29 naciones que se analizan en América Latina y el Caribe.
Pero, ¿por qué el país pasó de ser una economía mayormente libre a mediados de los 90 a ubicarse en los últimos lugares del ranking en 2015? De acuerdo a este análisis, el Estado no sólo interviene en la economía, sino que también «se expande la economía informal» y «la estabilidad monetaria es particularmente débil». «Existe un control de precios en casi todos los bienes y servicios», aseguró, mientras resaltó la regulación de tarifas de agua, luz y de la nafta, a través de los subsidios a la oferta.
Como sucedió en otras ediciones, la fuga de capitales volvió a centrarse en la escena aunque con un nuevo condimento: la entrada al default selectivo de la Argentina en julio del año pasado, tras no alcanzar un acuerdo con los holdouts. La facilidad o dificultad para abrir una empresa no es un factor menor a la hora de realizar el ranking y en el caso de la Argentina. Se necesitan más de 10 permisos y un mes para comenzar un negocio, un proceso que se califica como «incómodo» y «costoso».
La lupa sobre la política se posó en los escándalos de corrupción. El índice que The Heritage Foundation realiza con el periódico estadounidense The Wall Street Journal hace foco en el doble procesamiento del vicepresidente, Amado Boudou. El juez Ariel Lijo procesó al funcionario por cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública por el caso Ciccone, y la Justicia confirmó el procesamiento del funcionario por un auto con papeles falsos durante 2014.
¿Y en el resto del mundo?
Para determinar el grado de libertad que posee un país, el instituto analiza factores como el gasto público, derechos de propiedad, y diferentes tipos de libertades: financiera, para hacer negocios, laboral, comercial, monetaria, de inversiones y fiscal. En el caso de la Argentina, el proteccionismo sigue siendo una de las preocupaciones recurrentes dentro del comercio.
El 40% de los países analizados evidenció una caída interanual en el ranking, y junto a la Argentina, Venezuela, Bolivia, Argelia, Guinea Ecuatorial, Grecia y El Salvador registraron su índice de libertad económica más bajo en las últimas dos décadas.
Hong Kong y Singapur aún se mantienen como las economías más libres del mundo, mientras que Nueva Zelanda se ubica en el tercer lugar tras desplazar a Australia al cuarto lugar con respecto al año pasado. El top five de la lista lo completa Suiza. Estos países del ranking comprenden las únicas economías consideradas como libres. Dentro de las mayormente libres, Chile se mantuvo en el puesto siete y lidera la región, mientras que Estados Unidos también sigue en el lugar 12° como en 2014.
En América Latina, Colombia escaló seis lugares y se ubica 28°, por encima de naciones como Malasia, Austria y Corea del Sur entre los «mayormente libres». Por su parte, Uruguay está en la posición 43° y cuatro lugares más abajo se encuentra Perú, algunos de los países que entran en la categoría de «moderadamente libres».
En el puesto 118, Brasil es para este índice una economía «mayormente reprimida o cerrada» y fue una de las naciones que cayó en este ranking. «La erosión de la libertad económica en países como Argentina y Brasil exacerba la pobreza», especificó el informe. Dentro de la región, el país vecino tiene un nivel similar de libertad económica al de Nicaragua, Honduras y Guyana.