Marplatense en México contó cómo vivió el sismo en primera persona

La escritora Paula Ithurbide que vive desde hace años en la ciudad de Puebla, narró los detalles de lo que fue el impacto del fuerte sismo que sacudió a esa ciudad mexicana. Horas de angustia y tensión.

No hay acostumbramiento posible para una situación semejante, no importa cuantas veces se haya pasado por un temblor en una región que se caracteriza por la inestabilidad sísmica.

Paula Ithurbide, una escritora marplatense que vive desde hace más de una década en aquel país y puntualmente en la ciudad de Puebla, en la que se registró el epicentro del sismo, conversó con LIBRE EXPRESIÓN para contarnos la experiencia, informarnos de las primeras consecuencias y reflexionar acerca de lo que es vivir con los temblores como una posibilidad presente y cercana.

«No dio tiempo a nada», contó aún shockeada por la experiencia reciente. «Al ser un terremoto trepidatorio todo comenzó a moverse de golpe. Lo primero a lo que se atina es a salir rápidamente a la calle, aunque en mi caso con la necesidad de poner a salvo a siete perritas todo se hace más complicado», explicó.

«Lo primero en lo que uno piensa es en la vida. Los bienes materiales, el dinero y hasta los documentos pasan a un segundo lugar ante la incertidumbre de saber qué es lo que está pasando. Una vez a salvo, cuando uno se ha asegurado de que nada le ha pasado, viene la preocupación por los amigos, por llamarlos y por saber que tampoco ha sufrido daño alguno», expresó.

Si bien recuerda otras experiencias anteriores en las que también vivió temblores de fuerte intensidad, no duda al afirmar que «este es el más grande que me ha tocado padecer desde mi llegada a México. Fue realmente tremendo».

 

Foto principal: El Sol de Puebla