La versión fue creciendo hasta convertirse en un secreto a voces. Juan Román Riquelme le propuso a Boca volver a ponerse los cortos y firmar un contrato de seis meses. las condiciones.
Daniel Angelici sabe que sólo un milagro le permitirá seguir al frente de Boca tras las elecciones de diciembre. Y también sabe que la oposición, encarnada en Jorge Amor Ameal pero manejada por Roberto Digón, tenía una carta en la manga para seducir al socio de Boca: el retorno de Juan Román Riquelme.
Y decíamos «tenía» porque el macrista mandamás primereó y se dio cuenta que aquello de «a grandes males grandes remedios» se ha convertido en el único camino posible. Tan es así que encomendó a su hombre de confianza, el Secretario general César Martucci -de muy buena relación personal con el crack- que averiguase si los comentarios al pasar que habían surgido desde el entorno de Riquelme y que dejaban trascender algún deseo de volver tenían algún asidero.
El propio Arruabarrena, que no está para nada ajeno a la maniobra, había dicho unas horas antes que en su opinión «Román debería retirarse jugando», en lo que muchos entendieron como un mensaje de puertas abiertas para el 10.
Martucci no anduvo con vueltas y habló con el padre del jugador -que en los últimos años se había convertido en su vocero- para saber en que terreno estaban pisando. Las conclusiones fueron más que claras:
-Román quiere volver y está dispuesto a aceptar las condiciones económicas que le ponga Boca.
-Sólo tiene problemas con un jugador del plantel, Agustín Orion, pero sabe que la relación entre el arquero y el club es cada vez más tensa después de los ocurrido al finalizar el escandaloso partido con River.
-Quiere que el vasco Arruabarrena siga siendo el técnico y afirma que su deseo es apuntalarlo y no debilitarlo.
-Dice que con una buena mini pretemporada estaría en un 70% de su condición física a mediados de julio.
-Le pidió a Martucci que Boca hiciese lo posible para mantener en el plantel a Osvaldo ya que cree que con él puede potenciar su capacidad goleadora y ser bien abastecido.
– A fin de año se negociará si sigue otro período o Boca le organiza el partido de despedida.
¿En qué quedaron el enviado de Angelici y el padre de la estrella?. En que del lado del jugador se plantearía públicamente la posibilidad -la directiva de Boca no quiere aparecer pidiéndole la «ayuda» ante el mal momento- lo que de alguna forma ya se hizo con las declaraciones de Cacho Riquelme, el papá vocero, dejando la puerta abierta al retorno.
La mesa está servida, y la vieja y repetida historia por volver al escenario.
¿Riquelme a Boca?...es muy posible.