El Jefe de Gabinete descartó el reclamo por un bono de fin de año y la eliminación del Impuesto a las Ganancias. Dura respuesta gremial y amenaza de nuevos paros.
Finalizado el plazo del paro convocado para hoy por sindicatos del transporte entre las 4 y las 7 de la mañana, el jefe de Gabinete de la Nación, Jorge Capitanich, y el ministro de Economía, Axel Kicillof, cuestionaron la medida y el pedido por un plus salarial.
«El Estado hace un esfuerzo significativo. El Gobierno apela a la comprensión de todos. Entendemos que los trabajadores han tenido no sólo el aporte en materia salarial. Todo no se puede y es necesario que comprendan esta instancia y este año 2014″, dijo hoy Capitanich.
De esa manera, e jefe de Gabinete salió al cruce del reclamo por un bono de fin de año y la eliminación del Impuesto a las Ganancias pretendida por distintos gremios, entre los que se ubicó el sindicato de Camioneros, controlado por Hugo Moyano, entre otros gremios críticos del Gobierno nacional.
Así, Capitanich resaltó la política de subsidios del Gobierno nacional y señaló que una medida de fuerza perjudica a los trabajadores. “Los compañeros trabajadores deben comprender que hay muchos hermanos que deben trasladarse», indicó.
La medida de fuerza generó algunas complicaciones en la movilización de personas que tenían que trasladarse a sus trabajos, o llevar a sus hijos al colegio, algo que se pudo apreciar en largas colas en paradas de micros.
Por su parte, el titular de la Fraternidad, Omar Maturano, destacó la posibilidad de avanzar en una medida con mayor profundidad si es que el gobierno no hace lugar a los reclamos. «Vamos a evaluar la posibilidad de un paro general».
«Si el gobierno sigue en una posición, no significa que los trabajadores bajemos la cabeza. Vamos a pelear, a discutir. Vamos a evaluar la posibilidad de un paro general. Lo piden los trabajadores. Nosotros estamos para trabajar”, dijo a Vorterix.
Por su parte, Kicillof desestimó que haya inflación por sobre el 40% y apuntó a las consultoras privadas a las que acusó de utilizar una «una metodología que es una mística de chantería y oscuridad». «Hay intencionalidad política y el propio periodismo debería hacerse eco de una discusión al respecto».