Después de tres horas de declaración en el edificio de los tribunales locales, el acusado de haber cometido el crimen de Tito Arriagada negó que los hechos se hubiesen desarrollado de acuerdo hasta lo que ahora había trascendido.
Martín Mansilla negó haber atacado a la víctima y dijo que se encontraba en la esquina de Tejedor y Ferré cuando Arriagada cayó sobre el cantero central, pero que no tuvo nada que ver con el incidente.
Mansilla afirmó en su declaración que ese día circulaba por la avenida Tejedor cuando observó en la mano contraria a varias personas en la calle al lado de una camioneta Rastrojero. Tras conocer que el rodado había atropellado a un perro, comenzó a reclamarle al conductor para que se hiciera cargo de lo sucedido.
Según la versión que le dio al fiscal, mientras increpaba al hombre este tropezó, cayó accidentalmente al piso y golpeó su cabeza con el cantero central. Mansilla agregó que cuando Arriagada fue trasladado para ser atendido, él fue hasta el Hospital Regional para ver en que estado se encontraba.
Al concluir su declaración, Mansilla fue trasladado nuevamente a la Unidad Penal 44 de Batán. A partir de hoy, el fiscal dispone de quince días –prorrogables por otras dos semanas- para solicitar la prisión preventiva o dictar la falta de mérito.
