Complicado con varias bajas por lesión, el conjunto Tricolor cayó como visitante ante Obras Sanitarias por 89-68 en una nueva fecha de la Liga Nacional de Básquetbol.
Quilmes jugó anoche un primer tiempo muy cercano a su plan. Por momentos logró dominar y controlar a su rival y se fue al descanso largo adelante en las cifras por la mínima diferencia. Pero luego todo cambió. La prematura salida por faltas de Ivory Clark dejó al visitante en evidencia, especialmente en la pintura, y el trámite se revirtió por completo. En definitiva, Obras Sanitarias se impuso por 89 a 68, un resultado por el cual casi nadie hubiese apostado, teniendo en cuenta la primera mitad.
Los «tacheros» se afirmaron como únicos líderes de la Conferencia Sur de la Liga Nacional «A» de Básquetbol, en tanto el «tricolor», que siente el peso de tres jugadores fuera de acción por diferentes motivos, continúa en el quinto lugar de esa zona.
El cuarto inicial fue de muy bajo goleo, malísimos porcentajes de tiro (entre los dos equipos se combinaron para un 1/15 en triples) y la diferencia la marcó Walter Baxley (anotó 10 de los 14 puntos de su equipo en el segmento inicial).
Obras mejoró defensivamente con Tomás Zanzottera sobre Baxley, pero se destapó Clark, quien a su siempre rendidora faceta defensiva le sumó abundante gol. Así, el conjunto de Leandro Ramella tomó distancias de 21-14, adueñándose por completo del desarrollo.
Entonces llegó lo mejor de Obras en todo el primer tiempo. Con una defensa de riesgo generó robos, atacó mejor y estampó un parcial de 12-3 para pasar al frente 26-24, de la mano del inspirado Ramón Clemente (terminaría como la gran figura de la noche, con 30 puntos y 10 rebotes). No obstante, el devastador Clark le devolvió a Quilmes la delantera antes de llegar al descanso largo.
Limitado en la disponibilidad de personal, el «tricolor» tuvo que arriesgarse con Clark sobre la cornisa por las faltas personales. Y salió mal. El estadounidense tuvo que dejar el partido en forma prematura, Quilmes perdió a su mejor defensor, quien además había aportado mucho adelante, y su resistencia se desmoronó.
Con un Clemente intratable, el equipo de Julio Lamas se distanció rápidamente (52-38) y Quilmes ya nada pudo hacer. Obras ganó el tercer cuarto 35-15 y la brecha entre ambos se hizo enorme. En el juego y en el resultado. El último cuarto fue apenas un trámite administrativo para los de Núñez, que ya se habían asegurado ganar el partido en el segmento anterior.
