Invicto en Once Unidos, el equipo marplatense recibirá este domingo de las 21 a Ciclista Juninense, hundido en el último lugar de la Zona Sur, por la Liga Nacional de Básquetbol.
Previamente, a las 18.30, se medirán los equipos juveniles de ambos clubes por la Liga de Desarrollo.
El conjunto marplatense refrendó su gran momento en el torneo con el esforzado, y muy valioso, éxito del jueves ante Atenas de Córdoba. Los de Ramella ganaron seis de los últimos siete cotejos en el certamen. Y, cuando no han jugado muy bien como en la gira por el noreste, sacaron adelante situaciones comprometidas a fuerza de carácter, con muchas ganas. Como si fuera poco, Walter Baxley, jugador-franquicia del equipo, atraviesa un momento excepcional y toma los tiros de riesgo con una convicción cada día más firme.
Hoy se sabrá si el entrenador Leandro Ramella podrá contar, aunque sea durante algunos minutos, al alero Federico Marín. El jugador surgido en la Liga en Estudiantes de Olavarría sufre una inflamación en el nervio ciático y tuvo que ser tratada a través de un bloque realizado el último lunes.
Lo común es que los efectos positivos del tratamiento se noten a la semana. Mientras tanto, el alero quilmeño debió guardar reposo. Sin embargo, si el dolor cesa, su intención y la de Ramella es que juegue algunos minutos para ponerlo a punto para un cotejo más exigente como el del próximo miércoles frente a Argentino de Junín.
El panorama en el conjunto juninense, de momento el más flojo del torneo, es radicalmente distinto. No sólo apenas ganó cinco de veinticuatro partidos para ser el equipo de peor récord de la competencia.
Lo peor es que arrastra una serie de nueve derrotas consecutivas. Y que la última vez que ganó fue el 18 de noviembre del año anterior, hace ya más de dos meses. En lo que va de 2015 actuó sin extranjeros porque Carlos Strong fue dado de baja por bajo rendimiento y Jeremy Price viajó a Estados Unidos para operarse de una lesión de meniscos. Si no llegara a regresar, tampoco los dirigentes de su equipo, más preocupados en la coyuntura económica que en la deportiva, se alarmarían demasiado. La reducción presupuestaria es un hecho y esta temporada sin descensos les viene como anillo al dedo.
Fuente: La Capital