Por José Luis Ponsico (*) – Desde su vuelta a River, esta vez director técnico, agosto 2014, Marcelo Gallardo no había sufrido derrota tan humillante como la vivida en Bolivia.
Con planteo simple el «Jorge Wilstermann» ya había eliminado a Palmeiras y Atlético Minero, guiado por Cristián Chávez, ex Boca, alcanzó algo más que contundente 3 a 0. Dejó «herido de muerte» a River.
Ahora los bolivianos tienen ventaja que parece difìcil de remontar. River sin Sebastián Driussi, Lucas Alario y el uruguayo Rodrigo Mora, careció de «punch». En pocos meses al «millonario» se le fueron, promedio, entre los tres, unos 50 goles por temporada.
En el partido de ida además hubo graves errores en defensa. El juego aéreo lo había padecido contra Bánfield y antes en el Sur frente a Temperley. El DT riverplatense debe «reinventar» al equipo por tercera vez. Debido al éxodo en tres etapas.
Gallardo vivió el partido en Bolivia con asombro: River tuvo 72 por ciento la posesión del balòn, según números al final, sin encontrarle la vuelta al juego ofensivo, el propio. Le había pasado contra Boca en el amistoso en Córdoba.
Esta vez el rival lo sorprendió de entrada con un gol «de pizarrón»: el córner del argentino Marcelo Bergese, casi un desconocido en el fútbol «grande» de la Argentina, llevaba el efecto de «comba» hacia afuera.
El experimentado Edward Zenteno, parecía «escondido» detrás de los centrales de River. De pronto, intuyó dónde iba a caer la bola y con perfecto anticipo, «fusiló» a Germán Lux desde el punto del penal.
River tuvo la pelota y terreno. No pudo en tres cuartos hacer la diferencia. Igual, tuvo tres o cuatro situaciones muy favorables. Extrañamente, falló Ignacio Scocco que habitualmente dentro del área rival, no falla.
Una sola vez ganó River en Bolivia en cuatro décadas. Lo hizo en el´82, tiempos de otro éxodo de varios notables: Norberto Alonso, a Vélez Sarsfield; Juan José López primero a Talleres de Córdoba, un paso fugaz por Boca, le costó un cuarto de siglo de «condena», Daniel Passarella a Fiorentina y Ramón Díaz, Avellino, liga italiana.
La peor derrota hasta ahora, frente al Bolívar de Bolivia, en el ciclo del «Diablo» Marco Antonio Etcheverry, ídolo del fútbol del altiplano en los´90. River cayó 1-4 en marzo del 91. La altura, los errores y el rival inspirado. Algo que se repitió esta vez
Gallardo alcanzó el 75% de los puntos en el primer ciclo -River estuvo 31 fechas sin perder; doce primeras del final del ciclo de Ramón Díaz- en dos temporadas con varias bajas alcanzó cinco títulos internacionales y uno local.
Esta vez el desafío es el mayor de los tres años donde alcanzó una dimensión de ídolo que como jugador, talentoso, multicampeón en los´90, no había logrado. Tiempos de Ariel Ortega y Enzo Francescoli
(*) Columnista de la Agencia Télam, La Señal Medios y Libre Expresión