Pese a los esfuerzos del Ejecutivo y las negociaciones con los empresarios y el gremio, el aumento deberá esperar una semana. De cualquier forma ya está acordado y todo lo que viene es circo.
Nada llega a buen puerto porque ahora lo que está en el centro de la escena es la interna del oficialismo y la oposición llevando agua para su molino. Lo demás ya fue acordado: habrá aumento, no habrá entonces paro y por supuesto las empresas tomarán a los choferes por temporada ya que sin ellos no podrían cumplir las frecuencias de alta temporada y se perderían de ganar millones de pesos.
Otra vez el «montaje» del triángulo políticos-empresarios-sindicalistas salió a la perfección y sirvió para disimular responsabilidades frente a la opinión pública. Un escenario que todos conocemos y que ciertamente…ya aburre (además, por supuesto, de asquear).
Sorpresivamente y a pesar de que el titular del cuerpo, Guillermo Saenz Saralegui, había realizado una convocatoria formal, el interbloque de Cambiemos solicitó hoy en una reunión de presidentes de bloques suspender la sesión del Concejo Deliberante prevista para este jueves.
El planteo fue aceptado por el resto de los bloques, lo que evitó que el proyecto para aumentar el precio del boleto fuera rechazado debido a la resistencia de la oposición y de sectores del oficialismo de brindarle su apoyo.
Claro que mientras tanto empresarios y sindicalistas «llegaron a un acuerdo tras arduas negociaciones (¿¿¿???)» con respecto al personal, por lo que ahora «por el sacrificio de las partes y su responsabilidad ciudadana (¿¿¿???)» no habrá paro.
La sesión será el 28 y allí si se aprobará el aumento de tarifa. Todos ellos felices y nosotros…¿agradecidos?.
