(Por Florencia Cordero) La selección argentina de básquet inicia un nuevo proceso con los Panamericanos de Toronto como primer objetivo, pero el armado del plantel se vio afectado por una inaceptable superposición de fechas con la Final de la Liga.
El calendario de los Panamericanos de Canadá ya estaba establecido, pero la imposición de un nuevo formato de la competencia argentina por parte de la Asociación de Clubes (que extendió la competición un mes más de lo habitual), le impide a los mejores jugadores finalistas de la Liga poder ser parte de la selección nacional.
Si bien ya se sabía hace rato que esto iba a pasar, ahora -con Quimsa y Gimnasia clasificados a la final- ya sabemos con nombre y apellido quienes son los perjudicados, aunque el primero en sufrir este sinsentido fue el entrenador de la selección, Sergio Hernández. De la lista original de convocados que se anunció, seis jugadores no podrán participar en Canadá. Se trata de Leo Mainoldi, Gabriel Deck, Sebastián Vega y Nicolás Aguirre (de Quimsa); y Federico Aguerre y Pablo Orlietti (de Gimnasia).
El trabajo de preparación para la cita panamericana prevista para el 29 de junio, coincide con la Final de la competición nacional con fecha de inicio el 2 de julio en una serie al mejor de siete partidos entre los campeones de las Conferencias Norte y Sur, de acuerdo al nuevo formato implementado.
En consecuencia, las bajas en la selección obligaron al coach a tener que invitar a otros seis jugadores sólo para reforzar los entrenamientos ya que la reglamentación de los Panamericanos impide, a esta altura, sumar nuevos nombres a las delegaciones. Es por eso que fueron llamados Tomás Zanzottera, Ignacio Alessio, Franco Balbi, Iván Basualdo, Roberto Acuña y Andrés Landoni (que finalmente por una lesión no podrá estar) para no perder intensidad en las prácticas, pero sin chances de ser incluidos en el equipo que competirá en Toronto,
«Ante los problemas trato siempre de buscar soluciones», dijo el «Oveja» Hernández, lejos de querer generar conflicto por esta cuestión, y optó por ponerse a trabajar con lo que hay y planificar el año de la mejor manera posible teniendo en cuenta que el 2015 tendrá como compromiso más trascendente la clasificación a los Juegos Olímpicos de Río 2016 que se disputará en México en agosto.
En referencia a los jugadores finalistas de la Liga Nacional que serán bajas obligadas en Toronto 2015, el entrenador de la selección lamentó no poder contar con ellos y remarcó que «no es serio que juegen un torneo sin haber entrenado un sólo día». Pero aclaró que no necesariamente quedarán descartados para el Preolímpico: «No voy a castigar a un jugador por llegar la Final de la Liga y si no va a los Panamericanos que tampoco tenga chances de ir al Preolímpico. Sería un castigo que no merece».
Referentes como Luis Scola, Andrés Nocioni y Carlos Delfino, se sumarán para buscar la clasificación a Río, por lo que -como es habitual- la competencia panamericana es una gran ocasión para que muchos jugadores de la Liga Nacional tenga su experiencia y puedan empezar a insertarse. Pero es algo que la Asociación de Clubes no tuvo en cuenta.
A pesar de las desprolijidades a la hora de armar el plantel, el básquet de Argentina se presentará en los Panamericanos con chances de competir por una medalla con jugadores internacionales como Facundo Campazzo (Real Madrid, España), Nicolás Laprovíttola (Flamengo, Brasil), Nicolás Richotti (Tenerife, España), Marcos Mata (Franca, Brasil) y el debut del marplatense Patricio Garino (George Washington University, Estados Unidos).
Los jugadores del medio local involucrados en el proceso son Selem Safar (Obras), Marcos Delía (Boca), Tayavek Gallizzi y Luca Vildoza (Quilmes); Pablo Espinoza y Nicolás Brussino (Regatas); Franco Giorgetti -con problemas físicos- (Peñarol); Matías Bortolín y Juan Manuel Torres (Atenas); y Javier Saiz -como invitado- (Regatas).
«Sabemos que conseguir una medalla va a ser difícil porque Brasil es fuerte, Canadá es el local y para otros equipos puede ser más seductor todo lo que sea panamericano», analizó el coach Hernández. Y sentenció: «Queremos subir al podio. Sin excusas, con el equipo que sea, vamos a pelear por eso».
Argentina intentará sumar una medalla en Toronto pero también irá moldeando parte del equipo que luchará por la clasificación olímpica que es, sin dudas, el objetivo más importante del año. Esta planificación no se verá alterada, pero es una lástima que la nueva dirigencia de la Asociación de Clubes no haya interpretado que es necesario articular el calendario con la Confederación Argentina de Básquet para que los productos genuinos de nuestra competencia puedan tener su chance en la selección y no se vean privados de participar por el contrasentido que implica quedarse afuera por haber sido los mejores de la Liga.
