El joven basquetbolista marplatense Luca Vildoza se estremece de sólo pensar en la posibilidad de quedar en el plantel definitivo que jugará los Panamericanos, pero prefiere enfocarse en mejorar su defensa y vivir al máximo la experiencia con la selección nacional.
Antes de jugar el primer amistoso de la preparación para Toronto 2015, Argentina trabaja con un grupo conformado por algunos jóvenes con experiencia, otros más chicos que se están integrando y una tanda de invitados que suman en los entrenamientos.
Son 13 los jugadores que están en la preselección, de los cuales 12 serán los elegidos para los Panamericanos en la conformación de una plantilla que tendrá un promedio de 24 años. Hay que tener en cuenta el caso particular de Selem Safar (otro de los cuatro marplatenses del equipo argentino), cuya participación está en duda como consecuencia de un tratamiento que está realizando por una fascitis plantar.
En ese contexto, Luca Vildoza, a poco de cumplir 20 años, espera con ansias su chance de quedar en el plantel que disputará los Juegos pero trata de canalizar toda su energía en aprovechar su oportunidad para aprender y mejorar.
En diálogo con Libreexpresion.net, el prometedor base «cervecero» habló de sus expectativas en la selección, del apoyo fundamental de su familia y de la excelente temporada que tuvo Quilmes en la Liga Nacional.
-¿Cómo estás viviendo esta experiencia con la selección?
-Son muchas sensaciones. Llegué acá con muchas ganas de mejorar. En esta semana muy cansadora aprendí muchas cosas. Sé que tengo que mejorar la defensa e intentar ser un base más ordenado porque, más allá de eso, no soy un base con la experiencia de Campazzo o Laprovíttola. Trato de mejorar eso con la experiencia que voy ganado en estas prácticas.
-El entrenador dijo que te ve como un base definido para el futuro y no como escolta, ¿vos qué pensás?
-Me gusta tirar, pero hay muchos bases que anotan mucho, como lo fue Campazzo en su última temporada en Peñarol que era muy determinante para su equipo. Pero ahora estoy enfocado en mejor en defensa y que en ataque todo fluya.
-¿Cómo te sentís en este nuevo grupo en este proceso que se inició con la preparación para los Panamericanos?
-Algunos jugadores ya los conocía, hay muchos jóvenes de mi edad, pero de a poco vamos entrando en confianza. Más allá de cómo juguemos y de cómo salgamos en los partidos, nos va a servir formar un grupo unido para el futuro.
-¿Ya te pusiste a pensar que estás a un paso de quedar entre los doce que van a Toronto?
-Se me pone la piel de gallina de solo pensarlo. Por ahora sigo entrenando al máximo. Intento hacer lo mejor posible para estar bien y quedar entre los doce que sería un orgullo tremendo para mi.
-Tu familia siempre sigue muy de cerca todos progresos, ¿cómo están viviendo ellos este momento tuyo con la selección mayor?
-Están todo el día pendientes. Cada vez que termino una práctica tengo algún mensajito tierno de ellos. Están muy contentos y muy orgullos de que yo esté en la selección. Y si estoy acá es un 70% por ellos y un 30% por mi porque me ayudaron en todo desde que tengo 4 años. Es muy bueno tener una familia que te apoye en todo.
-¿Qué balance hacés de lo que logró Quilmes en esta temporada de Liga Nacional?
-Creo que fue muy positivo. No nos gusta perder, pero quedamos afuera con un equipo muy sólido como Gimnasia de Comodoro. El equipo encontró al final una química que veníamos buscando desde principio de año. Quedamos contentos porque una clasificación a la Sudamericana no se consigue todos los días y es un hecho histórico para el club.
