Por Florencia Cordero
En el final de su exitosa carrera como jugador de básquetbol, Rubén Wolkowyski está transitando de manera especial esta temporada de Liga en Quilmes. El «Colo» reconoció que disfruta de brindar toda su experiencia a los chicos del plantel y sigue mostrando, a los 41 años, que está vigente dentro de la cancha para hacer su aporte.
Tras la victoria de Quilmes ante Ciclista de Junín, Wolkowyski dialogó con Libreexpresion.net sobre el rendimiento del conjunto «cervecero» y su situación personal como jugador histórico que continúa con su profesionalismo intacto.
-¿Qué análisis hacés del triunfo ante Ciclista?
-Lo más positivo es que nos volvimos a levantar de una derrota muy dura en Junín y volvimos a defender. Creo que esa es la identidad que nosotros tenemos que tener. Es una Liga larga, complicada porque se juega seguido y si hay una regularidad defensiva se va a hacer mas fácil ganar los partidos por más que no tengas una buena noche ofensiva.
-¿Generó complicaciones estar sin dos jugadores como Romero y Marín?
-Al jugar casi día por medio, si te faltan jugadores se hace muy difícil. Y si no tenés con quien suplantarlos corrés el riesgo de perder muchos partidos y te vas para abajo. Pero nosotros podemos hacerlo y quedó demostrado con el trabajo que hicimos especialmente desde lo defensivo.
-¿Qué valor le das al hecho de mantener el invicto como local?
-Eso es muy importante. Tienen que saber que el que venga a jugar a Once Unidos no la va a tener fácil. Si ganás en tu casa, te asegurás varios partidos de local que te pueden poner arriba y después podés ir a buscar afuera uno o dos partidos para mantenerte ahí. Hacer una localía fuerte es algo muy importante.
-¿Cómo te sentís dentro del funcionamiento del equipo?
-Yo me siento útil para el equipo por más que no juegue. Desde el banco también me siento muy útil alentando a los chicos y ayudando a los más jóvenes. Mi trabajo no es necesariamente ofensivo ni mucho menos. Si tengo que anotar voy a anotar, pero defensivamente trato de darle buena energía al grupo y ordenar a los chicos cuando estamos mal atrás.
