Cristina Fernández de Kirchner quiere terminar su mandato como una vez se definió. »Amo construir, debo ser la reencarnación de un gran arquitecto egipcio», se autodenominó la Presidenta en agosto de 2012, cuando había encabezado la presentación oficial del Polo audiovisual, con la revalorización de la Isla Demarchi, una península ubicada en el sector extremo sur de Puerto Madero
Después de dos años, cuando en la propia Casa Rosada daban por caído en desgracia el proyecto, la jefa de Estado anunció ayer la construcción de un rascacielos de 360 metros de altura, que resultaría en el edificio más alto de Latinoamerica.
Tendrá la magnitud del Central Park de Nueva York, comparó la Presidenta. De tres propuestas (una de Cristóbal López, otra de Irsa de Eduardo Elsztain), con una inversión de $2.500 millones, ganó la licitación la propuesta de la constructora Riva S.A., que ha realizado obras del Metrobus macrista. La mandataria confió que la torre se convertirá en el símbolo de la Ciudad (ver aparte).
A 24 horas del debate legislativo del nuevo canje, Cristina Kirchner aprovechó la nueva cadena nacional para apuntar contra los diputados opositores que adelantaron su voto negativo, al pedirles que repiensen su voto contra el proyecto de ley de pago soberano local. Deberían reflexionar frente a esto que ha logrado el mundo, añadió en alusión a la asamblea de Naciones Unidas que ayer aprobó establecer un nuevo marco regulatorio para la reestructuración de deudas. Con respecto a la votación en la ONU, que fue celebrada con bombos y platillos en la Casa Rosada, la mandataria se jactó: Hemos sentado doctrina internacional en la materia, sabemos que muchos de los que se abstuvieron (fueron 41 países) tienen compromisos y en cuanto a los que votaron en forma negativa (11) les digo que necesitamos más palomas y menos buitres.
Luego volvió al plano local. ¿Cómo puede ser que legisladores argentinos voten en contra del pago soberano?, se preguntó la mandataria, con chicana inlcuida. No estamos pidiéndole que voten el default sino que voten pagar. Les pido que recapaciten, se quejó. Ser opositor también es una responsabilidad, planteó.
En otro tramo del acto, realizado en el Salón de las Mujeres de Casa de Gobierno, la Jefa de Estado le dedicó un párrafo al campo. Si hubieran vendido (la soja) cuando valía 560 dólares, en mayo hubiera sido el equivalente a un dólar de 11 pesos, yo se los dije. En notable como la gente puede actuar en perjuicio de sus propios intereses pero es parte de la democracia, señaló.
Además, Cristina Kirchner aprovechó la ocasión para anunciar la ampliación de la moratoria previsional, acompañado por el titular de la Anses, Diego Bossio. Todo esto es gracias a que en 2009 recuperamos los fondos previsionales para el Estado, algo que todavía no nos perdonan, afirmó la mandataria, antes de recordar al fallecido ex presidente Néstor Kirchner al sostener que fue quien en 2005 decidió el plan de inclusión jubilatoria.
