Cuando los extremos se tocan la vergüenza es reina

Estos carteles aparecieron pegados en barrios porteños. La quietud de la sociedad y la complicidad de la política vuelven a mostrar el antisemitismo en la argentina.

El titular de la DAIA, Julio Schlosser, afirmó hoy a la Agencia Judía de Noticias (AJN) que “las fuerzas de Nación, Provincia y Ciudad de Buenos Aires se van a poner de acuerdo” contra los carteles antisemitas que aparecieron hoy en Villa Crespo en referencia a la muerte del fiscal Alberto Nisman.

Schlosser aseguró que se comunicó con el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, que lo puso “inmediatamente en contacto con (el secretario de Seguridad), Sergio Berni”.

“Hemos puesto a trabajar a nuestros abogados para que formulen la denuncia por las conductas discriminatorias. Gabriel Camiser, abogado de la DAIA, informó que mantuvo una reunión personal donde estuvo presente la Policía federal y metropolitana, y dieron garantías de que se va a trabajar como las circunstancias lo requieren en el esclarecimiento del hecho. Se hará la individuación de aquellos que por sus conductas xenófobas, racistas y antisemitas pretenden sembrar en el país una desunión que las comunidades que vivimos acá y que formamos parte del movimiento del diálogo interconfesional merecen que este hecho sea esclarecido para que el virus de la xenofobia y la cuota de veneno que estos grupos vomitan sean erradicados para el bien del país”, agregó.

Schlosser subrayó que “más que nunca tiene que haber una respuesta mucho más rápida” por el contexto que está viviendo el país con la muerte del fiscal.

“No esperamos al día de mañana, de la misma manera que lo hicimos con Lago Puelo (el ataque antisemita que sufrió un hostel del sur del país). Seguimos confiando en los poderes del Estado, y que todas las fuerzas de Nación, Provincia y Ciudad de Buenos Aires se van a poner de acuerdo en este tema, que es una cuestión de Estado, no se puede tolerar que esto siga adelante.”

Esta mañana, los vecinos de Villa Crespo se sorprendieron al descubrir las avenidas Corrientes, Juan B. Justo y Scalabrini Ortiz empapeladas con afiches que decían “El judío bueno es el judío muerto. El judío bueno es Nisman”, en referencia al fiscal de la causa AMIA que falleció tras presentar una denuncia contra la presidenta Cristina Fernández de Kirchner por supuesto “encubrimiento a los iraníes”.

“Estos afiches son una afrenta a la dignidad humana”, expresó.

Por otro lado, el presidente de la DAIA manifestó que “la comunidad esboza síntomas de preocupación”, por la muerte de Nisman, pero “la comunidad, más allá de lo que algunos se empeñan en decir, está unida, abroquelada, en la AMIA, en la DAIA y en las instituciones”.

“Hoy más que nunca la comunidad está dando un ejemplo de madurez. Esto es una situación inédita para nosotros, sin embargo lo manejamos con la prudencia que la requiere.”

En referencia a la cercanía del inicio de las clases en las escuelas de la red escolar judía, destacó: “Nosotros nos reunimos con los responsables de las instituciones, no mantenemos nada en secreto. Todas las gestiones que hemos hecho las hemos comunicado a la prensa. La conducción de la DAIA no hace nada a espaldas u oculto a la ciudadanía. La ciudadanía está conciente de que todos estos casos de deben ser aclarados”.

Asimismo, como vicepresidente del Congreso Judío Mundial (CJM), explicó que recibió llamados del exterior. “El CJM y Congreso Judío Latinoamericano, a través de su secretario general, Claudio Epelman, está al tanto de lo que nos estamos ocupando, y tenemos el total apoyo y ratificación de que estamos en el camino correcto. Ellos están con nosotros y nosotros con ellos. Esto nos da una tranquilidad de espíritu de que la comunidad judía internacional entiende que estamos obrando con la prudencia del caso y con la firmeza de las circunstancias”.