El arbolito de Arroyo: al final no fue el pináculo de la fama…

Un viejo dicho sostiene que «no es lo mismo estar en el pináculo de la fama que estar en la fama con un pino en el….». El saber popular terminó encarnando en Mar del Plata. Punto final al cucurucho.

imagesEra cantado…¿cómo iba a sostenerse semejante adefesio en el corazón mismo de la ciudad turística más grande del país?. El «arbolito de Arroyo», como la gente ya lo había bautizado, pasó a mejor vida a las pocas horas de ver la luz.

Trataremos de recordarlo como una anécdota simpática, que dio tema de conversación tan solo por un par de días, porque de otra manera deberemos concluir que el nivel del escracho marca la tónica de la administración.

arbolitomemesNos quedará por siempre la duda acerca de su pertenencia al plan secreto de gobierno, su papel en la administración más exitosa de la historia y a que parte del gabinete de lujo corresponde su gestación.

Pero por suerte ya se fue…dejó de divertirnos y, de paso, también dejó de humillarnos.