(Redacción) – La Argentina enchastrada comienza a quedar en evidencia, y ella nos indica que la evasión es un mal que aqueja a demasiados sectores del poder real.
En lo que mucho se parece a una «guerra de tahures» el gobierno, involucrado en graves denuncias sobre lavado de activos, contragolpeó acusando a opositores.
La AFIP presentó ayer una denuncia por presunta evasión fiscal mediante operaciones de fuga de divisas y ocultamiento de depósitos por parte de clientes argentinos en la filial suiza del banco HSBC.
A continuación, los datos clave del caso.
-HSBC Suiza tiene, según la AFIP, 4040 clientes de nacionalidad argentina. Sin embargo, solo 125 declararon sus cuentas en ese banco ante la entidad que conduce Ricardo Echegaray y apenas 39 tienen declarados sus depósitos.
-El ente recaudatorio indicó que la evasión estimada a través de esta operaciones tiene un piso de US$ 3000 millones. Denuncia. El titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, brindó una conferencia de prensa para anunciar los detalles del caso. Foto: Archivo.
-Del total de ciudadanos investigados por ocultar cuentas bancarias, 2533 contribuyentes tienen sus domicilios radicados en Capital Federal, 164 son de provincia de Buenos Aires, 67 son de Santa Fe, 64 son de Córdoba, 56 son de Mendoza, 36 son de Tucumán, 27 son de Neuquén, 19 son de Entre Ríos y 15 son de La Pampa, entre los distritos más importantes.
-La AFIP obtuvo la información a partir del convenio suscripto entre Argentina y Francia para ‘evitar la doble imposición y prevenir la evasión fiscal en materia de impuestos sobre la renta y el patrimonio’ (Leyes 22.357 y 26.276). En ese marco, el administrador federal de la Dirección General de Finanzas Públicas de Francia entregó la información a la AFIP, en cds encriptados.
-Entre las maniobras detectadas, la AFIP denunció el ocultamiento de activos financieros, no declarados al fisco, y la utilización de sociedades off-shore en paraísos fiscales o fideicomisos para no identificar al titular de los fondos depositados.
-Panamá, Islas Caimán, Islas Vírgenes, Bahamas, Uruguay, Estados Unidos, Jersey, España y Suiza son los lugares donde se localizaron sociedades off-shore y fideicomisos utilizados como pantallas.
Todo lo ocurrido, sumadas las denuncias contra la familia presidencial y otros miembros del gobierno nacional, sólo sirve para tomar nota acerca de la habitualidad con que los sectores económicamente pudientes de nuestra sociedad utilizan la evasión como forma de ocultar maniobras, defender ahorros o simplemente especular.
Tal vez ahora, como parte de una guerra deplorable desde lo moral, comiencen a aparecer los U$S 400.000 millones que se calcula tienen los argentinos en el exterior.
Lo suficiente como para terminar con el hambre y el subdesarrollo en la nación.
Nada más…y nada menos.