Sociedad – La encuesta de la UCA que enfurece al gobierno de Cristina

crisEl empleo ya no garantiza a los argentinos poder salir de la pobreza Los planes sociales, principal política del kircherismo, aumentaron pero no produjeron cambios significativos en el nivel de inseguridad alimentaria. Creció la informalidad y la inestabilidad laboral. La inflación afecta los ingresos reales. El informe de la UCA sobre la situación social entre 2010 y 2013 aborda también los problemas de empleo, que agravan las inequidades sociales. En el gobierno sospechan que la Iglesia está detrás de estos números que dan por tierra con el relato oficial.

En el resumen ejecutivo se plantean los siguientes aspectos:

1 Precarización del empleo

En el período analizado se registra un leve descenso de la proporción de empleo pleno de derechos. Las políticas anticíclicas del gobierno nacional lograron reducir la tasa de desocupación a expensas de aumentar en términos relativos el subempleo inestable. Se evidenciaron en este aspecto algunos déficits serios: persistencia de un sector informal, heterogeneidad de la estructura productiva y posibilidades limitadas de acceso a un trabajo pleno de derechos.

2 Inestabilidad laboral

La alta rotación entre períodos de empleo y desocupación continúa siendo un problema por resolver; en la población económicamente activa, 1 de cada 4 personas entrevistadas experimentó al menos una situación de desempleo durante el último año.

3 Los sectores vulnerables

En cualquier caso, los sectores principalmente afectados han seguido siendo los que residen en villas y asentamientos precarios, los integrantes del nivel socioeconómico muy bajo, los integrantes del hogar que no son jefes de hogar, las mujeres, los jóvenes y los adultos mayores, los que no culminaron los estudios secundarios y los ocupados en el sector informal de la economía.

4 Persistente empleo en negro

Aun con el desarrollo de campañas para promover la registración laboral, el porcentaje de ocupados sin aportes al sistema de seguridad social continúa en valores elevados. Dentro del grupo de asalariados, 1 de cada 3 está bajo contratación laboral no declarada. Por otro lado, las inserciones de baja calidad en actividades por cuenta propia han determinado que 7 de cada 10 no realicen sus aportes jubilatorios.

5 Deterioro real del salario

El incremento de los ingresos laborales reales es mayor en los trabajadores de menor nivel socioeconómico. No obstante, esta recuperación no es tan relevante como para subsanar las inequidades existentes. En líneas generales, los ingresos reales medios apenas superaron el incremento del costo de vida.

6 Los planes sociales

Si bien hubo una expansión de los programas sociales entre 2010 y 2013, este hecho no se tradujo en un cambio estructural significativo en relación con la necesidad de cada sector de recurrir a tales programas como estrategia de subsistencia. El nivel de hogares con Inseguridad Alimentaria o Necesidades Básicas Insatisfechas no presentó cambios significativos entre 2010 y 2013.

«Un núcleo de la población no es necesario para este modelo»

descargaAgustín Salvia es Coordinador e investigador jefe del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica, que elabora los informes desde 2004. En declaraciones a Radio Mitre, ayer se refirió a los resultados sociales de los últimos 10 años, que para el Gobierno constituyen una «década ganada» y que según los críticos fue «perdida». «Hay aspectos que han mejorado de forma indiscutible y no se pueden dejar de señalar. La crisis de 2001, incluso hasta 2003, fue muy grave. A partir de allí hubo un proceso que produjo transformaciones importantes en cuanto a la recuperación del mercado de trabajo, de ingresos, de consumo, de recuperación del empleo, reducción de la pobreza, mejoras en la inversión pública y en la infraestructura social que hizo que mucha gente viviera mejor», planteó Salvia. Pero agregó: «Ahora, ¿qué ha ocurrido a la vez? Mantenemos todavía un núcleo duro de marginalidad, de población que no es necesaria para este modelo, para este sistema económico, y por lo tanto requiere de políticas, de programas sociales para ser sustentable». «El modelo económico no ha llegado a estos sectores. No les ha agregado una cultura capaz de integrarlos, y darles por lo tanto una política de seguridad capaz de mantener un sistema de equilibrio en términos de las relaciones sociales, de seguridad social, no sólo de seguridad física», añadió. Salvia puso un ejemplo: «La Asignación Universal por Hijo es algo maravilloso y fundamental dado que mucha gente vive de eso porque no puede vivir del mercado de trabajo. Pero básicamente no deja de ser pobre, aunque mejora su situación de indigencia». «Entonces, las deudas sociales persisten en esta década que algunos pueden decir que es ganada para muchos; pero que para otros no ha podido garantizar un desarrollo humano sustentable». «Lo que perdimos en esta década fue la oportunidad de planificar el desarrollo y el crecimiento», concluyó el especialista.