Un huracán que quiere seguir soplando

Omar Narváez no cree en el paso de los años y a pesar de la durísima derrota en Japón anunció que piensa seguir peleando y volver a ser campeón del mundo.

La durísima derrota del martes pasado en Tokio -por nocaut en el segundo round- ante el japonés Naoya Inoue, que le costó el título supermosca de la Organización Mundial de Boxeo, fue un duro golpe para Omar Narváez. Pero el argentino ya parece recuperado y sueña con volver a adueñarse de la corona. «Tomo esa pelea como un accidente que no me debilita para nada, ni significa el final de mi carrera. Me siento fuerte y con muchas ganas. Voy a volver a ser campeón mundial», aseguró Narváez en diálogo con la agencia Telam, tras su regreso a Trelew.

El boxeador de 39 años, que perdió el título en su 12ª defensa, afirmó que no se arrepiente de la estrategia con la que encaró el combate con el invicto japonés de 21 años. «No hay reproches. Llegué física y técnicamente muy bien, pero Inoue tuvo suerte, me sorprendió con un golpe … Me madrugó. No imagine que fuera tan fuerte, es un peleador explosivo», analizó.
«Pensé que una vez entrado en calor iba a poder dar vuelta la pelea pero no me dio tiempo a nada porque se terminó todo en dos rounds. Esa mano antes de los 20 segundos me dejó muy sensible, me conmovió y fue determinante. El rival tuvo el mérito de aprovechar su momento», explicó el chubutense, que volverá a entrenar la próxima semana con un objetivo claro en mente: recuperar su corona mundial.